Así lo describe Leonilde Torres, Bibliotecóloga
del Centro Acuícola y Agroindustrial de Gaira al expresar que significa la bonita
labor que ha realizado en el entorno de su lugar de trabajo junto a aprendices
e instructores de la institución en sembrar y adecuar la entrada de la biblioteca con palmeras y plantas ornamentales.
“No solo me he dedicado a prestar libros y computadores,
también me he dedicado con el corazón a hacer de mi profesión una experiencia
agradable y compartir ese mismo agrado con mis compañeros, y con los aprendices
a quiénes quiero como si fueran mis hijos…tomo la ida a Gaira como si fuera un
paseo por lo que asumo que mi entorno debe estar siempre lo mejor, tenemos un
sitio precioso, pero muchas veces la gente del mismo lugar se acostumbra y va
olvidando que la belleza que tienen hay que cuidarla y cultivarla”.
Leonilde, una bogotana, que llegó a la ciudad de Santa
Marta aproximadamente hace más de 4 años, siente y quiere a los
samarios de igual forma como a las personas de su ciudad natal.
Recordó como son los espacios para jardines dentro de
una casa. “Los espacios para jardines en Bogotá, son reducidos y nos tenemos que ajustar a
tener jardines en nuestros apartamentos solo en materas o en fotos, entonces, ¿como
no tener uno propio cuando el espacio, sitio y clima se presta?, fue
entonces cuando empecé a soñar con tener uno frente a mi sitio de trabajo, indagando
como debía hacer para gestionar la siembra de un jardín aprovechando el espacio
del contorno”, fue así como esta mujer trabajadora, sencilla y de una voz dulce
y melodiosa, decidió darle otro aspecto a su lugar de trabajo.
Con el apoyo de aprendices se le dio el toque de color
y vida a la biblioteca con árboles del Centro de Formación.
Una mañana entre pico y pala, Leonilde, decidió abrir
un hueco para sembrar las matas que había conseguido, pero se encontró que la
tierra estaba durisima; en ese momento pasaban aprendices del programa
Tecnologo en Agricultura de Precisión y con la calidad, experiencia y
colaboración características de un aprendiz SENA, se dieron a la labor de construir en la adecuación,
construcción y siembra de lo que hoy es la jardinera frente a la biblioteca.
Palmeras, corales, ginger y sábila son los elementos
paisajísticos que comprenden la entrada de la biblioteca. Para el mantenimiento
del lugar los aprendices del programa Tecnólogo en Agricultura de Precisión “me
sugirieron hacer un sistema de riego por goteo, el cual inmediatamente gestioné
y efectivamente éste fue colocado aprovechando una llave de agua cercana a la
biblioteca”.
Producto Final de la labor de aprendices, instructores
y por supuesto de la iniciativa Leonilde Torres.
El aprendíz Fernando José Polo Caballero, fue también
pieza clave para el mejoramiento ambiental y paisajistico del lugar, ya que fue
quién ayudo a Leonilde a sembrar las sábilas y darle el final a esta linda
labor.
“ Ahora es sólo mantenimiento y cuidado… para mi es una
satisfacción, pues siento mi trabajo como una extensión de mi hogar”.